La alianza tripartito, que no se materializó con un acuerdo de presupuestos, ha resurgido ahora en Barcelona para tumbar la rebaja fiscal que proponía Junts en la comisión de economía del miércoles. El concejal Arnau Vives ha defendido que el Ayuntamiento «tiene capacidad real» para adoptar políticas fiscales «más justas y eficientes» y ha presentado un paquete económico de seis medidas «para reducir la presión fiscal a familias, autónomos y pymes». Los Comuns y ERC han cuestionado que Junts incorpore medidas diversas en un mismo paquete y han cerrado filas con la idea expuesta por el gobierno de Collboni, que ha negado ser un problema para las clases humildes. «Este gobierno ha congelado los impuestos y la presión fiscal más importante ha sido a través de la tasa turística. Cuando no hemos podido lo hemos hecho con el IBI de aquel tipo de actividad que tenía impacto en el marco del turismo», ha defendido el teniente de alcaldía, Jordi Valls.
Entre las iniciativas de Junts, había dos propuestas sobre el IBI -entre las cuales la reducción general de un 4%-, una rebaja de un punto porcentual en el Impuesto sobre el incremento de valor de los terrenos urbanos y posibles bonificaciones nuevas al impuesto sobre actividades económicas. El paquete también pedía revertir el aumento del 8% la tasa de mercados y la gratuidad de la zona azul -y bonificación de la verde- a los vehículos con etiqueta de cero emisiones. Vives ha criticado que el ejecutivo haya optado por no tocar una política tributaria que convierte a Barcelona, ha señalado, en la segunda ciudad del Estado «con una carga impositiva por habitante más elevada».

Comuns y ERC acusan a Junts de querer «debilitar» la capacidad redistributiva del Ayuntamiento
Los Comuns y ERC han situado a Junts a la derecha y los han acusado de «debilitar» la capacidad redistributiva del Ayuntamiento de Barcelona. «La proposición en sí es un oxímoron. Comienza diciendo que el objetivo es reducir la presión fiscal a las familias con rentas bajas y medias, los autónomos y las pymes de Barcelona, pero todos los compromisos excepto la tasa que se propone a los mercados benefician más a las rentas altas que a las bajas», ha criticado Jordi Castellana. El concejal de ERC ha expuesto un mapa del valor catastral de Barcelona para señalar que «se acabaría bajando el IBI en Pedralbes, las Corts, Sant Gervasi, el paseo Marítimo o el paseo de Gràcia, y quien se beneficiará menos es el Besòs o la Marina, por ejemplo».
El concejal de los Comuns Guille López también se ha desmarcado de esta y otras propuestas. Sobre el IBI, ha apuntado que Barcelona ya incluye bonificaciones «importantes» para las rentas más bajas. Sobre la tasa a las actividades económicas, ha incidido en que se aplica «a negocios que facturan más de un millón de euros». El concejal ecosocialista ha reconocido que la administración «debe mejorar la ejecución presupuestaria», pero ha pedido que «no se utilice como excusa para aplicar medidas que no ayudan a quien más lo necesita».