Después de casi una década apostando por la fusión de la cocina de autor y el carácter de barrio, el restaurante El Petit Pau anunciaba el cierre de este pequeño restaurante de 37 m² este mes de junio. Pero cuando su propietario, el chef Pau Gascó ha vuelto de las vacaciones, se ha encontrado con una sorpresa muy desagradable. Tal como ha mostrado en un video publicado en las redes sociales, el techo del local ha quedado totalmente hundido a causa de un escape de agua. El propietario ha explicado que ha reventado un «calentador de agua eléctrico» del piso de arriba, que ha acabado hundiendo el techo y provocando destrozos al local. «
Un escape, no un sabotaje
De hecho, el mismo propietario ha respondido los comentarios de varios usuarios, que le preguntaban si había sido un sabotaje o un robo. Ha aclarado que ha estado un escape de agua de los vecinos de arriba. Con este incidente, el restaurante no podrá abrir como mínimo durante unos cuántos días. Una muy mala noticia teniendo en cuenta que el restaurante ya tenía previsto el cierre en junio.
Cuando anunció que plegaba, Gascó explicó que marchará con “la cabeza muy alta” y que bajará la persiana sin dejar “ninguna deuda” con proveedores ni instituciones, habiendo apostado por un modelo “que no era común” y con una estructura de costes también “singular”. “Aposté por mi barrio, que ya sabía que sería un valor seguro: el Pequeño Pau abrió las puertas en una calle secundaria de Sants cuando la zona todavía no había logrado los niveles de éxito y dinamismo actuales que espero que los organismos responsables sepan gestionar a favor de la comunidad”, relataba el Pau.
