En 2003, una pareja de halcones peregrinos adultos se estableció en una de las torres de la Sagrada Familia como parte del proyecto de reintroducción del halcón peregrino impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona y Thalassia Estudis Ambientals. La Basílica fue seleccionada como uno de los lugares idóneos para esta iniciativa, porque fue uno de los últimos refugios donde esta especie crió en Barcelona antes de su desaparición. Desde hace más de veinte años, cuando se acerca la primavera, los halcones crían en el nido que tienen en la Sagrada Familia. Con el fin de difundir y compartir el proceso de cría de los halcones, que tiene lugar usualmente entre los meses de marzo y abril, se ha instalado una cámara web en el nido.
De momento, la hembra ya ha puesto cuatro huevos, que se incubarán durante los próximos días, de modo que puede ver en directo el proceso de cría y nacimiento de los polluelos en las torres del templo de Gaudí. Desde 2005 hasta 2020 se ha contabilizado ya el nacimiento de 42 crías, según los datos facilitados por el templo expiatorio.
¡Tendremos nuevos habitantes en la #SagradaFamília! 😍 Desde hace más de veinte años, casi cada primavera una pareja de #falcons peregrinos adultos regresan para hacer su nido. 🪺 Accede a la retransmisión en directo del proceso de nacimiento y cría de los halcones en nuestra web 🔗… pic.twitter.com/SwCUdf9IOj
— La Sagrada Família (@sagradafamilia) March 14, 2025
Un viejo conocido de Barcelona
El halcón peregrino tuvo una presencia habitual en el cielo de Barcelona hasta 1973, cuando se abatió la última pareja instalada en la basílica de Santa María del Mar.
Pero la Sagrada Familia no es el único lugar donde podemos ver en directo la nidificación de estas aves. Desde el parque natural de los Ports, otra cámara enfoca el nido de águilas marcenques, una de las rapaces forestales más desconocidas en el parque. Es un ave migratoria transahariana y su nombre se debe a que la mayoría de los ejemplares llegan a la península Ibérica en marzo.