El Ayuntamiento de Barcelona ya tiene las llaves de la antigua estación de Sant Andreu. El distrito ha confirmado, aprovechando un ruego de Junts en el último plenario de Sant Andreu, que ya ha iniciado «las primeras tareas de protección» del edificio, en desuso desde el pasado 3 de diciembre de 2023. Diferentes entidades vecinales se habían posicionado para ocupar este espacio, que con el estreno de la nueva estación había quedado huérfano, pero el abandono del edificio durante tres meses lo ha degradado. El consejero del PSC David Paredes ha asegurado que los técnicos municipales ya ha instalado alarmas en el recinto y que «bien pronto» empezará la retirada del material actual y el mobiliario vandalitzado.
En una primera instancia, el Ayuntamiento había pedido la cesión de uso del inmueble. Semanas antes del cambio de estación, la exregidora de Sant Andreu Lucía Martín (BComú) confirmaba conversaciones con Adif para conseguir una cesión «larga y estable» del espacio. En todo caso, el distrito admite ahora que el Ayuntamiento asumirá un alquiler, que a estas alturas todavía se está negociando. Sea como fuere, Paredes confirma que la tramitación está «avanzada».
Varias entidades podrían beneficiarse
La Asociación de Vecinos de Sant Andreu de Palomar es una de las entidades que podría beneficiarse de este alquiler. Actualmente instalados en un pequeño edificio del Dr. Balari y Jovany, la entidad vecinal cifra en 6.000 euros el dinero que deben a la propiedad y avisa que no puede asumir los 900 euros mensuales de alquiler que se les pide «por un local en mal estado». Desde la junta detallan al TOT Barcelona que están «a la espera de que limpien el local» de la estación para poder entrar y ver cómo queda.
La otra entidad que ha pedido un espacio a la antigua estación es la Germandat Andreuenca. Tienen 7 gigantes, cabezudos y el Comolí. El jefe los gegantes, Pere Seda, explica al TOT que Sant Andreu Comtal cuenta con «puertas altas y un techo elevado», características perfectas para una entidad como la suya. Seda explica que ahora tienen el material guardado en la Fabra y Coats, pero que el sueño de la entidad es crear un «espacio museístico» de la Fiesta Mayor. «Estamos contentos porque el distrito se ha comprometido, de palabra, a llevar los gigantes a la estación antigua, pero somos conscientes que nuestro proyecto todavía no está aprobado y no sabemos si aquello acabará siendo un espacio polivalente», expone Seda, que recuerda que necesitan un espacio donde «exponerlos». «No acabaremos del todo satisfechos si nos los arrinconan a un espacio, almacén ya tenemos», concluye.
Calendario incierto
El Ayuntamiento ha confirmado que ha iniciado una limpieza del espacio, pero todavía no está claro si quien reformará el espacio es el mismo Ayuntamiento o Adif. A la espera de esta segunda fase, Germandat Andreuenca ha pedido poder guardar su material en la estación una vez el espacio ya esté limpio. En todo caso, por ahora ninguna entidad tiene claro el calendario definitivo. Sea como fuere, el distrito ya ha confirmado que la estación acabará, tarde o temprano, en manos de las entidades. En una situación similar están el edificio histórico de la Clínica Sant Jordi –está previsto que pase al Ayuntamiento– y la renovación del Rec Comtal, dos espacios próximos a la estación antigua y que el tejido asociativo de Sant Andreu lucha para recuperar y que también acaben en manos vecinales.
