Este domingo por la tarde la historia de la Sagrada Familia ha dado un paso más. El templo ha abierto, por primera vez en la vida, la iluminación de las cuatro torres evangelistas, el conjunto arquitectónico que culmina el emblema de la capital catalana desde hace un mes, aproximadamente, momento en que coronaron las torres de Mateu y Joan. Antes de encender las luces, pero, se ha celebrado una misa solemne oficiada por el nuncio apostólico Bernardito Auza y concelebrada por el cardenal Joan Josep Omella y los obispos auxiliares de Barcelona. Estas luces se podrán ver cada noche desde hoy hasta pasado el día de Navidad y, como era de esperar, han reunido toda la atención de los turistas y barceloneses que andaban por el alrededor de la Sagrada Familia.
Las cuatro torres están coronadas por las cuatro figuras aladas del tetramorfo, a cargo del escultor Xavier Medina-Campeny, con las cuales la iconografía cristiana ha representado los narradores de la vida de Jesús. Para conmemorar la culminación de las cuatro torres, la Sagrada Familia ha programado varias actividades. Además de la misa, la bendición e iluminación de las cuatro torres de los Evangelistas de este domingo, el próximo 16 de noviembre se celebrará un coloquio sobre el significado de estas piezas y el 18 de noviembre, un concurso de dibujo para estudiantes de entre 16 y 25 años.

Nueva fecha en el calendario
Tal como explicó el presidente delegado de la Junta Constructora del Temple Expiatorio de la Sagrada Familia, Esteve Camps, en una entrevista en el diario Cataluña Cristiana, el templo no estará acabado en 2026, como estaba previsto. Se estima un retraso de entre ocho y nueve años: “Si no tenemos un contratiempo importante como fue la pandemia, en un máximo de diez años la Sagrada Familia estará acabada”, exprés Camps. Es decir, según sus declaraciones, la Sagrada Familia no estaría del todo terminada hasta el año 2034.