«La Sagrada Familia es la catedral de Europa». Los cuadernos oficiales que explican los detalles del templo diseñado por Antoni Gaudí lo tienen claro. La basílica ofrece «el tesoro de la espiritualidad, de la concordia y de la reconciliación». El arquitecto modernista desgrana en todas y cada una de sus obras su fe cristiana, que en el caso de la Sagrada Familia es más que evidente. Cada rincón, cada torre, campanario, entrada, tiene alguna explicación religiosa. Y el nombre, como era de esperar, también: «La Sagrada Familia lleva este nombre en honor a la santa familia de Nazaret: Jesús, su madre María y José, el esposo de María», explica el primero de los diez documentos oficiales que detallan los secretos de la iglesia.
Los documentos ilustrativos del templo dan más detalle del vínculo de la Sagrada Familia con la familia de Jesús. Quienes comenzaron el proyecto, los mismos que en pocos meses encargaron a Gaudí la dirección de las obras, eran justamente la Asociación Espiritual de Devotos de San José. El templo, por tanto, dignifica a la persona y la familia como núcleo de la sociedad. Así lo explican en los cuadernos: «Jesús vivió unos treinta años en Nazaret, un pueblo de Galilea, en el actual estado de Israel. Allí trabajaba de carpintero junto a su padre legal, José, mientras María, la madre de Jesús, trabajaba en las tareas del hogar. Por eso la Sagrada Familia es un lugar que recuerda cómo el trabajo dignifica a la persona y cómo la familia es el núcleo primero de la sociedad, un espacio de amor entre todos sus miembros».
Será la construcción más alta de Barcelona
Arquitectónicamente, cada rincón tiene un vínculo con la familia y seguidores de Jesús. Los apóstoles aparecen en las columnas y en los campanarios, y la virgen María tiene una de las torres más altas de la construcción, solo por detrás de la misma torre de Jesús. Está previsto que una cruz de más de veinte metros la corone en 2026, el último paso para que el templo llegue a los 172,5 metros. No será más alta, porque Gaudí dejó claro que ninguna obra humana puede superar la obra de Dios. La Sagrada Familia, por tanto, será más baja que Montjuïc -177,72 metros-, la montaña más cercana a Barcelona.
