La Rambla es sin duda uno de los grandes iconos de Barcelona. Este emblemático paseo recibe cada día la visita de decenas de miles de turistas que no quieren dejar pasar la oportunidad de andar por su característico pavimento que simula las olas del mar antes de que desaparezca por completo una vez completadas las obras de reforma de esta arteria de la capital catalana. Entre el grueso de visitantes, un porcentaje bastante elevado corresponde a ciudadanos norteamericanos, que sobre todo durante la temporada estival eligen la ciudad como destino para sus vacaciones.
Sin embargo, esta fascinación yanqui por la ciudad y, en concreto, por la Rambla viene de lejos. Prueba de esto es que entre los preciados archivos Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos se guardan al menos dos fotografías antiguas de este paseo barcelonés. Buceando por el catálogo en línea de esta institución se puede llegar fácilmente a estos dos documentos, ambos publicados a principios del siglo XX y disponibles para su descarga gratuita.
Dos escenas cotidianas de principios del siglo XX
La primera de las dos imágenes data del 1902 y fue publicada por Underwood & Underwood, un productor y distribuidor de fotografías fundado en la ciudad norteamericana de Ottawa en 1881. La obra retrata una escena cotidiana de la Rambla con varias personas paseando arriba y abajo por el paseo, al cual define como la principal arteria comercial de la capital catalana. La principal protagonista de la escena es una mujer que anda sin advertir aparentemente la presencia de la cámara y mirando a otro lado, seguida de dos hombres, uno de los cuales vestido con uniforme militar, que sí que parecen haber detectado el objetivo.
La segunda de las instantáneas fue publicada en el año 1908 por H.C. White Co, una compañía fundada en Nueva York el 1870 y también dedicada a la distribución de material fotográfico. La imagen muestra una parte de la Rambla capturada desde un punto elevado, probablemente uno de los edificios que dan directamente a la arteria, donde se puede ver también muchas personas circulando arriba y abajo y un tranvía que flanquea uno de los extremos del paseo central, una escena que ya hace tiempo que pasó a la historia.
