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Descubren un refugio antiaéreo de la Guerra Civil durante obras en Consell de Cent

Los vecinos del Clot han visto cómo parte del pasado del barrio afloraba en las últimas semanas a través del descubrimiento de un refugio antiaéreo de la Guerra Civil. A la altura del número 605 de la calle del Consell de Cent, entre las calles del Dos de Maig y de la Independència, unas escaleras de piedra flanqueadas por paredes de ladrillo de color terroso se adentran en el subsuelo bajo la superficie actualmente ocupada por un carril bici. La entrada está tapada por unas losas de acero y el perímetro está rodeado por vallas que bloquean el paso a los curiosos que intentan captar algún detalle entre la penumbra del interior. Lo que hizo saltar la liebre fueron unas obras que se estaban llevando a cabo en el lateral montaña de la calzada que flanquea la fachada norte de la plaza de las Glòries. Concretamente, se trata de los trabajos de ampliación de la red de agua freática que tienen lugar en diferentes puntos de la ciudad como el entorno de Montjuïc, donde las máquinas han borrado los últimos vestigios de la estación superior del funicular ubicada hasta 1981 a los pies del castillo.

La actuación que ha revelado la presencia de este búnker casi centenario se centra en la calle del Consell de Cent, entre el paseo de Sant Joan y la calle de la Independència, y tiene el objetivo de conectar con una nueva tubería de agua freática los depósitos existentes precisamente en el paseo de Sant Joan y en el parque de las Glòries, ubicado en la esquina Independència. Por ello, los operarios han ido levantando el asfalto desde principios del pasado mes de abril para poder hacer pasar esta canalización. Los trabajos debían finalizar a mediados del pasado mes de junio, pero, los obreros no contaban con el hallazgo del refugio bajo el trazado del carril bici. Con el afloramiento de los primeros indicios, el Servicio de Arqueología de Barcelona tomó las riendas de la intervención para acabar de excavar en este lugar. El resultado fue el descubrimiento de una de las entradas al recinto subterráneo, que se encuentra en un aparente gran estado de conservación y recuerda mucho a la del número 292, otro búnker que fue localizado en febrero de 2023 en el otro extremo de la ciudad, frente al 46 de la calle de Piquer, en el barrio del Poble-sec.

Con el hallazgo, las obras para hacer pasar esta nueva tubería de agua freática han tenido que modificarse para no alterar el conjunto patrimonial. En el lado montaña, se ha desviado el carril bici y se ha señalizado y cerrado el acceso al refugio. Las tareas se han trasladado entonces al otro lado de la calle, donde se ha abierto otro agujero para poder continuar con la actuación y conectar la red con el depósito de Glòries. Todo esto ha retrasado los trabajos, que podrían finalizar si no hay nuevos imprevistos durante este mismo mes de julio.

Las obras de ampliación de la red de agua freática se han visto afectadas por el hallazgo de este refugio antiaéreo / A.R.
Las obras de ampliación de la red de agua freática se han visto afectadas por el hallazgo de este refugio antiaéreo / A.R.

Demoliciones que silencian los testimonios

El descubrimiento del búnker ha sorprendido a vecinos y comerciantes del barrio. Muchos desconocen que en este lugar había habido un refugio y otros se enteraron cuando vieron el agujero con las escaleras de piedra y preguntaron directamente a los arqueólogos que trabajaban allí. Entre los más veteranos de la zona, los herederos de la antigua tienda de muebles Ramon Amenedo, ahora cerrada, pero que durante décadas estuvo situada justo frente a los vestigios, tampoco tenían ningún recuerdo de la presencia de este recinto subterráneo. A pesar de que en la zona aún quedan en pie varios edificios centenarios, muchos de ellos casitas de una o dos plantas, buena parte de estos están actualmente tapiados u ocupados porque están afectados como parte del proyecto de reforma de la fachada norte de la plaza de las Glòries. El planeamiento prevé la demolición de hasta tres manzanas de casas de la calle del Consell de Cent, entre Independència y Castillejos, que permitirán ganar cerca de 26.400 metros cuadrados de zona verde conectados al parque ya existente. En total, unas ochenta fincas donde vivían medio centenar de familias, de las cuales ya solo queda una pequeña parte que espera un realojo que debería llegar en los próximos meses. El resto aceptaron las copiosas indemnizaciones que les ofreció la administración para expropiar los inmuebles erigidos en torno a los antiguos Encants Vells.

Unas planchas tapan el acceso al refugio antiaéreo de la Guerra Civil que ha aparecido durante unas obras en la calle del Consell de Cent / A.R.
Unas planchas tapan el acceso al refugio antiaéreo de la Guerra Civil que ha aparecido durante unas obras en la calle del Consell de Cent / A.R.

Esta situación de impás antes de las demoliciones -que salieron a concurso el pasado mes de abril por unos dos millones de euros y que deberían arrancar a finales de este mismo año- ha dejado los edificios con un aspecto decadente, como si el tiempo se hubiera detenido, contribuyendo a la degradación de la zona. De rebote, esto también ha supuesto que buena parte de los testimonios o descendientes que podían aportar luz a la historia del refugio ahora descubierto han tenido que abandonar sus hogares o los locales y comercios que regentaban. Para poder averiguar un poco más sobre la trayectoria del búnker solo nos queda revisar la información recopilada en los archivos del Servicio de Arqueología de Barcelona. Según figura en los documentos de Defensa Pasiva recopilados por el Archivo Municipal Contemporáneo de Barcelona (AMCB), la ubicación de este refugio encajaría con dos que hasta ahora no habían sido localizados nunca y de los cuales solo se tenía constancia gracias al listado de recintos antiaéreos que data del 16 de julio de 1938 y que fue publicado en el Atlas de los Refugios de la Guerra Civil española en Barcelona.

Alguno de los antiguos edificios y comercios de la fachada norte de la plaza de las Glòries que se han visto afectados por las demoliciones y la apertura del nuevo parque / A.R.
Alguno de los antiguos edificios y comercios de la fachada norte de la plaza de las Glòries que se han visto afectados por las demoliciones y la apertura del nuevo parque / A.R.

La opción más plausible es que las escaleras encontradas formen parte de uno de los accesos al número 313, un espacio subterráneo en forma de galería que se extendía bajo la calle de la Independència, entre las calles del Consell de Cent y de Aragó. Este búnker tenía una capacidad para 720 personas, había sido financiado con subvenciones públicas y contaba con tres bocas revestidas y con escalones. Presentaba una longitud de 200 metros lineales, revestidos en 135 metros a una profundidad de 10 metros, y tenía una anchura de galería de 1,50 metros y una altura de 2 metros, ocupando una superficie total de 300 metros cuadrados. Ahora bien, también podría tratarse del número 445, un refugio en forma de galería también inventariado en el listado de 1938 que se extendía bajo la calle del Dos de Maig, muy cerca de la confluencia con Consell de Cent. Las diferentes intervenciones y obras que se han llevado a cabo a lo largo de los años en la zona, como el desmantelamiento de los antiguos Encants Vells o la reurbanización de la plaza de las Glòries, no habían permitido localizar hasta ahora vestigio del recinto subterráneo, que también se habría financiado a través de ayudas públicas.

Un fragmento de historia integrado en el nuevo parque verde

A la espera de saber si se trata de uno de estos dos refugios anotados o bien de un tercero del cual aún no se tenía constancia, ya que mucha documentación sobre estos búnkers se destruyó con la entrada de las tropas franquistas en la ciudad, desde la Asociación de Vecinos del Clot ven el hallazgo como una oportunidad de mantener un fragmento de la historia de la zona como parte del nuevo parque verde que debe abrirse en la fachada norte de la plaza de las Glòries. Consideran que si el espacio está en buen estado de conservación se podría integrar dentro del proyecto para hacerlo visitable para la ciudadanía como también se pretende hacer con la recuperación de alguno de los tramos del trazado del antiguo Rec Comtal, que discurre en diagonal por debajo de las fincas afectadas y pendientes de demolición.

Alguno de los antiguos edificios y comercios de la fachada norte de la plaza de las Glòries que se han visto afectados por las demoliciones y la apertura del nuevo parque / A.R.
Alguno de los antiguos edificios y comercios de la fachada norte de la plaza de las Glòries que se han visto afectados por las demoliciones y la apertura del nuevo parque / A.R.

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