La batalla por los actos de cultura popular a la Fiesta de Gracia se ha endurecido en la primera jornada de celebraciones. Después de las concentraciones ya vividas en las primeras horas de este jueves, la Coordinadora de colles de cultura popular de Gracia ha convocado una manifestación, a manera de «marcha fúnebre» por la cancelación de los principales acontecimientos de las jornadas. La marcha ha comenzado su recorrido en la plaza Trilla, y prevé finalizar en la plaza de la Vila, donde se prevé escenificar el «luto» con minuto de silencio. Todo ello después de una parada en la plaza del Diamante, desde donde los organizadores han hecho una leída de su manifiesto. La intervención de la entidad ha ido acompañada de una fumata negra, para acompañar el motivo fúnebre del recorrido, al grito de «sin cultura no hay fiesta». «Las colles seguirán presentes en las plazas y calles», han alertado; encendiendo el conflicto que mantienen con el Distrito de Gracia, a quien reprochan «no haber estado a la altura» en la mediación entre la Colla Vella y la Coordinadora. La marcha de este anochecer se une a las diversas protestas que ya se han podido presenciar durante la mañana, destacando especialmente la que ha irrumpido a la misa de fiesta mayor a la parroquia de Santa Maria de Jesús, que ha provocado que los regidores municipales presentes tuvieran que salir por la puerta trasera del edificio. En cuanto a la afluencia, el Ayuntamiento apunta que habrían participado unas 400 personas.
En su intervención, los miembros de la CCCG han estado, de hecho, especialmente agresivos contra el Distrito, a quien acusan de «chantaje» para forzar la resolución de un choque «complejo, que requiere tiempo». En este sentido, reivindican el rol de las asociaciones de barrio, que, desde el inicio de la problemática, han «trabajado intensamente» para encontrar un punto en común. «Las colles hemos invertido incontables horas de reuniones y asambleas, hemos moderado discursos para construir mensajes consensuados y hemos sido proactivas en la hora de hacer propuestas», espeta el manifiesto. Como complemento al trabajo de base pidieron mediación a las autoridades del consistorio al barrio, hecho que, acusen, no se produjo. Antes al contrario, «actuaron tarde y mal, dos días antes del inicio de la fiesta mayor imponiendo un bloqueo a todos los actos de cultura popular». La propuesta desde el Ayuntamiento, informan, contemplaba que la Colla Vella de Diables participara en las festividades «como si no hubiera pasado nada», una solución «en absoluto imparcial» que la Coordinadora habría rechazado de pleno. «Consideramos que la desavenencia se tiene que resolver en el marco de las colles, sin chantajes ni imposiciones desde el Distrito», reiteran los participantes.

Un conflicto que viene de largo
Con un carácter «solemne», la marcha ha mostrado fumaradas, velas encendidas y otras decoraciones para velar la «muerte» de la cultura popular a la Fiesta de Gracia. Todas las colles presentes, además, han participado con la vestimenta propia de cada organización. Hay que recordar que el bloqueo de las actividades populares surge de las desavenencias entre la Coordinadora y la Colla Vella de Diables, todo ello con la agresión añadida del Distrito. El choque entre los Diablos y la CCCG, en un principio, provocó la cancelación de las propuestas culturales de fuego, si bien finalmente ha golpeado también las madrugadas, el séquito o el pasacalle, entre otros momentos característicos de la semana grande gracienca. Solo han quedado de pie, justo es decir, la invitada de los gigantes, prevista para el sábado 17, y la jornada castellera de domingo 18.