El lago de la Creueta del Coll, uno de los espacios emblemáticos de Barcelona, donde refrescarse en verano, abrirá este año durando cerca de tres meses, desde este sábado, 8 de junio, hasta el 3 de septiembre, ha informado el Ayuntamiento en un comunicado. En un principio, el emplazamiento no tenía que estar en funcionamiento por las restricciones de la sequía, pero la salida de la fase de emergencia ha permitido que pueda operar como refugio climático.
El lago de la Creueta del Coll se encuentra en una antigua cantera del barrio del Coll. Abrió en 1987 después de ser transformada por los arquitectos Oriol Bohigas, David Mackay y Josep Maria Martorell. Una de las joyas del lugar es la escultura de Eduardo Chillida,

Instalaciones renovadas
A pesar de no ser una piscina, mucha gente se refiere al lago como una piscina. Este año, detalla el Ayuntamiento, abre con las instalaciones renovadas, con unos nuevos vestuarios, hasta ahora inexistentes, y con los lavabos accesibles para personas con movilidad reducida. Además, se ha llevado a cabo una mejora de la instalación eléctrica y de la cubierta de los WC, así como un almacén y vestuario para el personal del parque. La inversión total ha subido unos 340.000 euros.
Los horarios y los precios
La zona de baño del lago de la Creueta del Coll estará abierta cada día, con un horario entre las 9.30 horas y 19.30 horas de lunes a viernes, y entre las 10.00 horas y las 20.00 horas los fines de semana, con un aforo máximo de 800 personas. Para poder acceder habrá que comprar entrada
En la nota de prensa que ha difundido, el consistorio recomienda bañarse con escarpines, zapatos acuáticos o calcetines de agua, ya que el pavimento del lago, de poca profundidad, es «irregular». De hecho, en julio de 2020, en plena pandemia, el lago tuvo que precintarse, después de que una sesentena larga de personas resultaron heridas en los pies por la instalación defectuosa de un mosaico durante unas obras. En un primer momento, el Ayuntamiento no reconoció los desperfectos y en agosto de aquel mismo año rectificó su versión y asumió que tendría que hacer nuevas reparaciones.

Otros problemas
A lo largo de los años, el lago de la Creueta del Coll ha sufrido otros problemas y se ha tenido que cerrar en varias ocasiones. El año 2018, al poco de abrir por San Juan, se tuvo que clausurar al detectarse filtraciones de agua. El problema obligó a hacer unas obras importantes que se prolongaron más allá de la temporada de baño de 2019, y la piscina no volvió a funcionar hasta 2020. De hecho, fueron estas obras las que causaron las heridas a los pies de la sesentena de usuarios citados con anterioridad.
En julio de 2022, la piscina se vio afectada por una explosión en la sala de máquinas y un derrame de cloro por una mezcla accidental de productos. Una persona tuvo que ser atendida por inhalación y 280 usuarios fueron desalojados. El incidente obligó a volver a cerrar el lago de forma provisional, aunque al día siguiente pudo abrir con normalidad.