¿Quién era y por qué se llamaba así Copito de Nieve? Es una pregunta tan poco original como pertinente, más de veinte años después de su muerte. El Ayuntamiento estudia cómo hacerle un homenaje -que los grupos municipales acordaron en 2023- dándole su nombre a una calle de la ciudad y haciéndole una estatua en un espacio aún por determinar. Lo hace entre los partidarios de venerar su figura y los que quieren recordar que fue víctima del colonialismo. En medio de todo esto encontramos algunas certezas menos conocidas.
El gorila albino apareció en 1966 en la entonces Guinea Española cerca de su madre, que acababan de matar. Una noticia impactante que llenó espacios en la prensa internacional. «Se ha encontrado el primer gorila blanco conocido. La madre había recibido un disparo mientras asaltaba una plantación de bananeros en Río Muni, una provincia de la Guinea Ecuatorial Española, justo al norte del ecuador, cerca de la costa oeste de África. La madre era negra», informaba el 23 de febrero de 1967 el New York Times. En ese entonces era una cría y meses más tarde llegó a Barcelona. Entonces era una especie única, pero aún no era Copito de Nieve.
¿Quién le puso por primera vez el sobrenombre de Copito de Nieve?
Un año después de su llegada a Barcelona, en marzo de 1967, dos periodistas de la revista National Geographic se interesaron por el tema, tal como recoge el mismo portal del Zoo. Eran Riopell y Zahl. Su artículo se titulaba ‘Snowflake, the world’s first white gorilla’ (Copito de Nieve, el primer gorila blanco del mundo), la primera vez que encontramos este nombre. El nombre fue arraigando y el famoso gorila albino pasó a llamarse Copito de Nieve.

En Copito de Nieve vivió los primeros 11 meses de Barcelona en un piso, como una mascota más, haciendo vacaciones y todo con la familia de adopción. Luego vivió en el Zoo. Tuvo 21 hijos, con tres hembras diferentes, y murió de cáncer de piel.