La ilustradora Pilarín Bayés ha hecho un mural gigante de 60 metros de largo -200 metros cuadrados de superficie- en una calle de Barcelona. En concreto, la obra ha sido pintada en el muro exterior de la finca de Can Ripoll, propiedad de Núñez y Navarro, en la calle de los Madrazo, 79 del distrito de Sarrià-Sant Gervasi, y se podrá ver hasta otoño de 2027.
El mural es un homenaje a la gente mayor y el lugar donde se ha ubicado no es causalidad, ya que en el solar se tiene que construir una residencia de gente mayor, que gestionará el grupo Lantús. El equipamiento contará con unas setenta plazas para residentes y funcionará también como centro de día.
Hecho sobre un vinilo que se retirará cuando se acabe de construir el edificio, el trabajo de Bayés es también un homenaje a la capital catalana, con la Sagrada Familia, el Barça, las Tres Xemeneies, la playa, la pérgola del Fòrum y otros muchos símbolos de la ciudad.
Las situaciones cotidianas de los abuelos y los niños
Hasta ahora, Bayés nunca había hecho murales efímeros, «que se retiran con el tiempo», pero asegura haber disfrutado con la iniciativa y ver «como todo lo que se ha planificado sobre el papel queda reflejado en el mural», ha dicho. La obra gira alrededor de la vida que comparten los abuelos y los niños. «Es un recordatorio de como ambas generaciones viven las situaciones cotidianas».

Con un estilo muy colorista, la ilustradora de Vic ya cuenta con otro mural en la Maternitat, en el distrito de las Corts, donde repasa la historia de la institución, que fue inaugurado en 2022. Y, recientemente, ha estrenado otro en la Pobla de Segur (Pallars Jussà), donde rinde un homenaje al patrimonio del pueblo, con los raiers, las fallas, los clubes deportivos y los bomberos, entre otros elementos que destacan. La obra se ha instalado en el parque del Alcalde Boixareu.
Un proyecto de arte urbano de Núñez y Navarro
El mural de la calle de los Madrazo forma parte del proyecto de arte urbano NN Wallery de Núñez y Navarro, que suma ya unos treinta trabajos. Según la constructora, NN Wallery cuenta con la participación de artistas urbanos, grafiteros y grandes ilustradores del mundo del cómic, que transforman los muros de obra en galerías de arte al aire libre, «donde proyectan su interpretación de Barcelona con total libertad». Este proyecto se divide, por un lado, en muros de construcciones, donde el arte es efímero, ya que se retiran una vez acabadas las obras de la promoción en cuestión. Y, por otro lado, los