Un grupo de creadores de videojuegos se ha propuesto convertir espacios emblemáticos de Barcelona en los escenarios de la mítica colección de libros
La Sagrada Familia, la Casa Batlló, el Tibidabo, la Biblioteca de Catalunya, el Hospital de Sant Pau o el Cementerio del Poblenou serán algunos de los espacios donde estarán escondidos los 300 gatos que protagonizarán el nuevo videojuego, que podría ver la luz este mismo verano si consigue recavar el dinero necesario. Una propuesta muy sencilla, pero que puede resultar «de lo más gratificante», puesto que es «respetuosa con el jugador» y está pensada para «todos los públicos», según señala Neus Vinyallonga, una de las impulsoras, en declaraciones a la ACN.
El juego prevé salir de entrada en catalán, castellano e inglés, para ordenador y contará con una especie de salón de la fama donde el jugador podrá ver fichas de los gatos que vaya recolectando a medida que se avance en la trama donde se incluirán su nombre, aficiones y principales características. La propuesta se encuentra actualmente en fase de micromecenazgo y el equipo tiene de momento garantizados unos 6.000 euros, a pesar de que necesitan llegar a los 16.000 para poder hacer realidad el proyecto. La campaña de micromecenazgo finaliza el próximo 2 de mayo y parte de los beneficios irán destinados al Jardinet dels gats, un espacio para felinos de la ciudad.
Prueba piloto en la Sagrada Familia
El grupo que está desarrollando el videojuego cuenta actualmente con cinco personas -entre las cuales un programador, un ilustrador, un editor de video y un músico- y ya está trabajando para lanzar una primera demostración de la propuesta donde se podrá buscar a ocho gatos en la zona de la Sagrada Familia, que en una fase más avanzada del proyecto podría abrirse por dentro para continuar buscando felinos en su interior.
