El alcalde Jaume Collboni ha aceptado la petición de ERC de reducir la afluencia de turistas al Park Güell un 11% en dos años. Una propuesta inicial que desde el ejecutivo no descartan ampliar más adelante. Esquerra Republicana ha defendido su apuesta en la comisión de Economía y Hacienda, alegando que “las problemáticas persisten y la convivencia cada vez está más tensionada”. El republicano Jordi Coronas ha admitido que la medida es “insuficiente” para los vecinos, que exigen una reducción de los visitantes del 50%, pero ha descrito el acuerdo con el PSC como un “paso necesario”. “El precio de la entrada ha pasado de 10 a 18 euros y permite tener ingresos para el mantenimiento. En 2023, antes de este incremento de precio, el parque generó 34 millones de euros. Ahora se duplican los ingresos, la reducción de visitantes no generará ningún impacto económico negativo”, ha defendido Coronas.
El teniente de economía, Jordi Valls, ha sumado el acuerdo con ERC a una lista de medidas –entre ellas el aumento de precio pactado con los Comuns el año pasado– que permiten «gestionar el turismo». El socialista ha citado al activista tecnológico Carlos Ratti, que aprovechando su estancia en Barcelona ha defendido en una entrevista a La Vanguardia que “hay que cobrar la entrada al turista y cuanta más demanda haya, más cara debe ser”. “Este es un elemento que hemos discutido cada vez que hablamos de gestión del turismo”, ha especificado Valls, que ha pedido ver «hasta qué punto podemos hacer una reducción de la gente y hasta qué punto tenemos capacidad de incrementar las tarifas». El único voto contrario a la reducción ha sido del PP. ERC y PSC han sumado el aval crítico de los Comuns y también de Vox.

Los Comuns piden ejecutar la reducción el próximo año
Los Comuns, que han votado a favor, han criticado que el acuerdo no se haya trabajado con los vecinos y han pedido una transacción –que ERC y PSC no han aceptado– para que la reducción de visitantes llegue directamente el próximo año. “Votaremos a favor porque es mejor esto que nada”, ha admitido, en todo caso, el concejal Guille López. «El año pasado se propuso un incremento del 80% del precio, que lo pactamos con BComú. Lo hicimos nosotros –ha dicho Jordi Valls señalando a los Comuns– y lo comunicamos a los vecinos sin haberlo pactado con ellos. Es importante hablar con los vecinos, pero no debemos deslegitimar la capacidad de acuerdos como el que hemos alcanzado con ERC». Jordi Valls ha especificado, ante algunas críticas de la oposición, que el acuerdo sobre la reducción de visitantes pasará por los órganos de gobierno de Barcelona Serveis Municipals (BSM), el actual gestor del parque y encargado de fijar las tarifas.

