Comer churros con chocolate el 1 de enero es toda una tradición. Después de las celebraciones de Año Nuevo, cuando muchos han pasado la noche despiertos y con ganas de algo dulce y reconfortante, también es habitual en muchas familias hacer una parada por la tarde o por la mañana para probarlos bien calientes, acompañados de una taza de chocolate espeso o un café con leche. Los churros son, de hecho, fritos sencillos de masa de harina y agua, fáciles de preparar y que reconfortan del frío que muchos pasarán esta noche si salen a la calle. Os hacemos una selección -que no significa que no haya churrerías de gran nivel en todos los barrios- por si queréis empezar el año con esta tradición.
La Pallaresa Xocolateria Xurreria (barrio Gòtic)
Uno de los grandes iconos dulces del centro histórico de Barcelona. Situada en la calle Petritxol, La Pallaresa mantiene viva la tradición de las antiguas granjas, con churros recién fritos y chocolate espeso que forman parte del imaginario colectivo de la ciudad, especialmente en fechas señaladas como el primer día del año.
Xurreria Laietana (Via Laietana)
Establecimiento muy consolidado en uno de los ejes de conexión entre Ciutat Vella y el Eixample. Su ubicación estratégica la convierte en una parada habitual tanto para desayunos como para meriendas, con una oferta de churros clásicos que atrae a público local y visitantes.
Xurreria San Román (Ciutat Vella)
Churrería tradicional de la calle dels Banys Nous, con una larga trayectoria y un fuerte carácter histórico. Es una de las direcciones más reconocidas del centro para probar churros de manera rápida, a menudo con colas en días festivos, pero muy arraigada en la memoria gastronómica de Barcelona.

La Selecta de Churros (entorno Sagrada Família)
Situada cerca de uno de los puntos más visitados de la ciudad, esta churrería se ha consolidado como una opción práctica para consumir churros con chocolate o para llevar. A pesar de la constante afluencia de público, mantiene un funcionamiento ágil y una oferta clara y directa.
Xurreria Trébol (Gràcia)
Referente clásico del barrio de Gràcia, especialmente frecuentado por los vecinos. Con una actividad muy vinculada al calendario festivo, es una churrería de proximidad que mantiene la tradición de los churros como desayuno o merienda popular fuera de los circuitos más turísticos.
Xurreria Las Palmeras (Sant Martí)
Un clásico muy querido en Sant Martí, con una clientela fiel que se acerca especialmente los días festivos. Situada en una zona de paso entre el Poblenou y el Besòs, es una opción habitual para comprar churros para llevar y mantener viva la tradición de barrio el primer día del año.
Churrería Poblenou (Poblenou)
Churrería de proximidad en uno de los barrios con más vida social de la ciudad. Ideal para hacer una parada después de pasear por el barrio o regresar de la playa en invierno, ofrece churros recién hechos y conserva el espíritu de las churrerías de toda la vida.
Xurreria Xocolateria Centre (Sarrià-Sant Gervasi)
Un referente dulce en la parte alta de Barcelona, donde los churros conviven con otras propuestas de pastelería tradicional. Muy frecuentada por familias del barrio, es una opción tranquila para empezar el año con chocolate caliente y churros.
Xurreria Sant Andreu (Sant Andreu)
Situada en la calle Gran de Sant Andreu, eje comercial y social del barrio, esta churrería es una parada casi obligada en días señalados. Su carácter popular y la ubicación la convierten en un punto de encuentro habitual el 1 de enero.
Xurreria La Xurre (Les Corts)
Alejada de los circuitos turísticos y muy arraigada en el barrio, La Xurre es una de esas churrerías que mantienen la tradición con discreción y constancia. Ideal para los vecinos de Les Corts que quieren empezar el año con un desayuno dulce y sin colas excesivas.

