Una nueva manifestación contra el turismo masivo en Barcelona ha bloqueado el acceso a una de las entradas principales del Park Güell. Durante cerca de media hora los manifestantes se han concentrado en la entrada de la calle Olot, una de las entradas más populares y destacadas, ya que da acceso a la escalinata del dragón. Bajo el lema de ‘¡Decrecimiento turístico ya!’, ‘Stop turistificación’, ‘Cerremos el grifo al turismo’ y ‘No nos echaréis de Barcelona’, cerca de medio centenar de personas de diversas entidades vecinales barcelonesas como el Consell Veïnal del Turó de la Rovira o la Assemblea de Barris pel Decreixement Turístic de Barcelona (ABDT) han denunciado el impacto del turismo masivo en los barrios y cómo afecta a los vecinos. «No hemos querido dejar pasar el Día Mundial del Turismo para hacer una acción simbólica contra la turistificación de la capital catalana. Y hemos venido a uno de los rincones más turistizados y masificados por el turismo como es el Park Güell«, ha apuntado Daniel Pardo, miembro de la ABDT, en declaraciones recogidas por la ACN.
Durante la concentración se han gritado varias consignas como el clásico ‘Tourist go home’ y también se ha lanzado una traca de petardos, se ha arrojado agua con pistolas contra los turistas y se ha leído un manifiesto contra el turismo masivo en Barcelona. «Collboni se presenta como el alcalde del turismo sostenible y con la promesa de que en 2028 eliminará los pisos turísticos», se ha destacado en este manifiesto conjunto que también ha atacado al otro lado de Sant Jaume, ya que según exponían «nada más lejos de la realidad. Se trata de una ley de la Generalitat que ya veremos cómo se concreta». Collboni, sin embargo, ha sido el blanco de las críticas, y han criticado que «Collboni también habla del cierre de tres terminales de cruceros en el Puerto de Barcelona, ocultando la construcción de una megaterminal que hará que el tráfico de cruceristas no se reduzca». «La turistificación conlleva precariedad laboral y expulsión de los barrios», han sentenciado.

El Park Güell, el ejemplo claro de la turistificación
La protesta, que se ha realizado a las puertas del Park Güell ha querido ejemplificar cómo la obra de Gaudí ha sufrido los efectos del turismo. El Park Güell ya no es turístico sino totalmente turistizado, ya que hay un negocio detrás. Tenemos un parque privatizado», ha destacado Daniel Pardo, miembro de la ABDT. «Que no puedas entrar en un parque público de Barcelona de manera libre y tengas que mostrar un carnet significa que hay algo que no funciona», ha lamentado un Pardo que ha asegurado que la reducción a la mitad del aforo máximo del Park Güell «no cambiará nada. Lo que hace falta es reducir la presión turística sobre la ciudad, desde el Park Güell a la Boqueria, y cambiar un sistema económico de Barcelona claramente secuestrado por el sector turístico».