Desde el 2 de octubre de 2025 y hasta el 2 de agosto de 2026 se podrá visitar en el Museo de Historia de Cataluña (MHC) la exposición El pueblo gitano de Cataluña: historia y cultura, una muestra de gran formato y de referencia organizada por el MHC con la colaboración de la comunidad gitana de Cataluña. La exposición se enmarca en la conmemoración del 275 aniversario del Baró Estradipen (Gran Redada de 1749) y de los 600 años de la llegada del pueblo gitano a la península Ibérica, en el marco del Año del Pueblo Gitano 2025.
La muestra, comisariada por la activista gitana Mercedes Porras, recorre seis siglos de presencia del pueblo gitano en nuestro país y reivindica su legado histórico, cultural y social. Pretende reconocer, valorar y visibilizar la historia y la memoria del pueblo gitano de una manera abierta, diversa y real, evitando tanto los estereotipos como el victimismo o la exaltación de los protagonistas, para dar a conocer los hechos, personajes y anécdotas que forman parte de nuestra historia.
Desde su llegada a Cataluña en el siglo XV hasta nuestros días, los gitanos y las gitanas han sufrido estigmatización, separación forzosa, persecución y asimilación. La exposición analiza la forma en que llegaron, sus oficios, la lengua, la represión que sufrieron y la legislación antigitana, y presenta al pueblo romaní como una de las primeras culturas globalizadoras del mundo, una cultura que ha recibido y aportado rasgos culturales, artísticos y lingüísticos a los territorios donde ha echado raíces durante siglos. Esta muestra, que da la palabra, de manera directa y testimonial, a los miembros de las multitudinarias y diversas comunidades gitanas catalanas, tiene por objetivo completar la historia de Cataluña, porque los gitanos y las gitanas catalanes no han sido extranjeros en nuestro país.
La exposición permite al público adentrarse en el inmenso legado del pueblo gitano en Cataluña y, más allá de resaltar su aportación cultural, social y lingüística, invita a reflexionar sobre los retos históricos y contemporáneos que aún persisten.
En palabras del director del MHC, Jordi Principal, «nuestra sociedad es diversa y todos tienen historias que contar, que son también historias de nuestro país. El pueblo gitano llegó hace 600 años a la península Ibérica y, durante siglos, ha sufrido incomprensión, estigmatización, persecución e incluso genocidio. Contar su historia es un ejercicio de memoria histórica y una manera de mirar Cataluña con otros ojos. Hemos querido que este proyecto dé voz a los gitanos y gitanas, con el compromiso de mostrar su realidad como individuos y como comunidad».
Para Mercedes Porras, comisaria y activista gitana, «Esta exposición es una oportunidad para contar nuestro pasado con voz propia y para construir un futuro de respeto e igualdad para todas las personas».
La exposición propone un recorrido por nueve ámbitos que combinan rigor histórico y vivencias personales: desde los orígenes del pueblo gitano y las persecuciones que ha sufrido, hasta su cultura viva, las luchas por los derechos y los retos de futuro. El relato da voz directa a los gitanos y gitanas e invita al público a reflexionar sobre el antigitanismo estructural y la necesidad de reconocimiento y reparación simbólica.
Una exposición viva y participativa
La exposición «El pueblo gitano de Cataluña: historia y cultura» es el resultado de un amplio proceso participativo con la comunidad gitana catalana, dinamizado por el equipo del MHC, encabezado por Raquel Castellà, coordinadora y documentalista de la exposición: «El trabajo de mediación ha sido clave para crear esta exposición, que es el resultado de un diálogo constante con la comunidad que ha permitido construir un relato riguroso, plural y compartido. Las aportaciones de la comunidad han sido imprescindibles para dar autenticidad al relato de la exposición. Cada testimonio es una pieza única del rompecabezas, narrada con sus propias palabras y con la sabiduría particular de quien la ha vivido. La comunidad nos ha pedido una exposición viva, donde las personas sean las protagonistas y nos hablen en primera persona».
En total, se han recogido más de 160 testimonios orales de toda Cataluña. La muestra ofrece un espacio donde la comunidad es protagonista, habla en primera persona y comparte memoria, deseos y sueños. Un lugar para escuchar y ser escuchados, que refleja lo que la comunidad gitana siente, quiere y sueña.
Además, la muestra reúne objetos inéditos y más de 150 imágenes seleccionadas por su valor como testimonio del pueblo gitano catalán, procedentes de diferentes fondos depositados en archivos de Cataluña. La alianza de diferentes museos y archivos permite sumar esfuerzos y voluntades en el marco de la conmemoración de los 600 años de la llegada del pueblo gitano.

Asimismo, se han incorporado objetos cedidos por familias gitanas. Este trabajo es fruto de una interrelación entre el museo y la comunidad gitana que ha permitido generar sinergias, establecer vínculos estrechos e intercambiar conocimiento y acciones comunes a favor de la memoria y el patrimonio gitano catalán.
Esta iniciativa se enmarca dentro de la estrategia social del Museo de Historia de Cataluña, que impulsa proyectos de cocreación y participación comunitaria con el objetivo de hacer del MHC un espacio abierto de encuentro, diálogo y construcción de memoria colectiva, y dar voz a aquellos colectivos que históricamente han estado infrarrepresentados en el relato oficial.
Uno de los grandes retos de la responsabilidad social del MHC es mantener vínculos estrechos con la comunidad, trabajar en beneficio de la ciudadanía, el entorno y la comunidad local, con la ciudad y nuestro país. Esta exposición es un firme compromiso del museo para continuar fortaleciendo este vínculo con la comunidad, favoreciendo su desarrollo y aportando valores al territorio y a la ciudadanía.
Un recorrido inmersivo
La muestra incorpora un espacio inmersivo dedicado a los tapices La Historia de Carrabara, dicha de los egipcios una serie de diecisiete tapices flamencos tejidos en la ciudad de Tournai (Bélgica) entre los años 1500 y 1520, en el taller de Arnould Poissonier. Las piezas que representan la vida de los gitanos en su llegada y asentamiento a las afueras de la ciudad y que permiten al visitante adentrarse en estas obras excepcionales y entender cómo han contribuido a forjar la imagen del pueblo romaní en el imaginario europeo. Esta instalación ofrece una experiencia visual y sensorial que enriquece el recorrido y ayuda a contextualizar la representación histórica de los gitanos en el arte.
La muestra incluye también un recurso interactivo con los datos recopilados por Bernard Leblon, una de las principales fuentes documentales para entender la persecución y el control del pueblo gitano en Cataluña. Los visitantes pueden explorar de manera visual y dinámica los datos históricos, lo que favorece una experiencia inmersiva y una mejor comprensión del contexto represivo.
Finalmente, la exposición tiene un espacio audiovisual dedicado al cine, donde se analiza cómo se ha representado la comunidad gitana en el cine a lo largo de la historia, a menudo a través de estereotipos. Este espacio da visibilidad a las nuevas miradas gitanas, que reivindican una representación más justa, plural y fiel a la realidad de la comunidad.
Nuevas narrativas de ficción y banda sonora inédita
El personaje de Parul nos acerca a la contemporaneidad a partir de un personaje ficticio al que damos nombre, rostro y personalidad. A partir de ella se han construido diversas narraciones que nos presentan a una mujer gitana que acompaña al visitante en un viaje por diferentes ámbitos y épocas de la muestra. Parul nos comparte sus anhelos, sus delirios y sus emociones, ofreciendo una mirada íntima y humana sobre su experiencia y su tiempo.
La exposición cuenta, además, con una banda sonora original y exclusiva, formada por diferentes piezas de ambientación espacial, creadas para la ocasión por músicos gitanos.

Un final simbólico: la obra de Gabi Jiménez
La exposición se cierra con una obra creada especialmente para la ocasión por el artista visual gitano francés Gabi Jiménez, activista cultural de referencia reconocido internacionalmente. Esta pieza, concebida como un homenaje al pueblo gitano catalán, sintetiza el mensaje de memoria, dignidad y futuro que inspira toda la muestra. Se trata de una instalación artística original y única, que utiliza el lenguaje del arte contemporáneo para transmitir el valor y la riqueza de la cultura gitana catalana y conectar emocionalmente con el público visitante. La intervención busca proyectar un mensaje de orgullo, identidad y memoria dentro de un marco de diálogo cultural.
Catálogo y actividades paralelas
La muestra se completará con un catálogo monográfico, que se publicará próximamente. De manera paralela, se está elaborando un documental dirigido por el realizador Guillermo Cruz, que recogerá una parte de los testimonios grabados durante el proyecto. Esta producción audiovisual, que verá la luz a principios del próximo año, quiere convertirse en una herramienta de sensibilización y difusión que ofrezca una mirada plural, humana y auténtica sobre la realidad del pueblo gitano en Cataluña. Además, el MHC programará diferentes actividades para profundizar en la historia y la cultura del pueblo gitano.
